Europa necesita un erasmus fuerte para los Indiana Jones de pymes
Europa necesita un erasmus fuerte. Sobre todo en el ámbito de las pequeñas y medianas empresas (pymes). La columna vertebral de la economía europea son estas compañías. Euractiv, el portal de referencia de información comunitaria, asegura que en el continente existen 23 millones de pymes, un sector fuerte que genera unos 3,9 billones de euros en facturación y da empleo a 90 millones de trabajadores.
El reciente éxito de una iniciativa de intercambio de trabajadores en empresas de diferentes países ha despertado una conciencia sobre la necesidad de catapultar hacia adelante el que ya se conoce como erasmus para este tipo de sociedades, que permita a las empresas reciclar intelectualmente a su fuerza laboral. Se calcula que sólo la mitad de las sociedades sale a los mercados exteriores.
El espacio europeo ha permitido a las compañías poder vender a clientes de otros países y aprovisionarse de bienes y servicios. El director general de la Confederación de Pequeñas y Medianas Empresas CEA-PME, Stefan Moritz, ha reflexionado sobre esta necesidad de las sociedades. El objetivo es que las pymes prosperen para empujar la actividad de las economías de los estados. Las empresas pueden acceder a clientes de todos los países del Espacio Económico Europeo y, a la vez, encontrar proveedores más convenientes.
“El marco legislativo ha eliminado los obstáculos legales y las tarifas de exportación, pero aún quedan muchas empresas pequeñas y medianas que se enfrentan a otros obstáculos más prácticos”, indica Moritz.
Intercambio de éxito
El reciente éxito del plan MobiliseSME de intercambio de trabajadores parece que va a conducir a la Unión Europea a incrementar los fondos destinados a ello en el próximo presupuesto. En este momento existe una dotación de 1.300 millones de euros para este proyecto.
Las pymes constituyen la columna vertebral de la economía europea. En España representan nada menos que el 99,8% del producto interior bruto (PIB). Sectores como los relacionados con el turismo (comercios, hostelería, alojamiento…) son territorio exclusivo de estas empresas.
CEA-PME considera que la mejor fórmula para revitalizar las pymes es buscando un modelo para interconexión entre fronteras de una forma fácil. “Las conexiones más fuertes entre compañías en diferentes países europeos conducirían naturalmente a empresas más competitivas capaces de responder a los desafíos de la globalización”, señala Moritz.
Un erasmus de emprendedores
El programa europeo de intercambios para emprendedores ya ha permitido el intercambio de conocimientos entre 2.500 parejas de emprendedores dentro de este programa de la Comisión Europea (CE). El objetivo es alcanzar 10.000 trueques hacia el año 2020. Para los nuevos emprendedores, este programa mejora su capacidad para gestionar una pequeña compañía, permite el aprendizaje de una serie de capacidades, proporciona una experiencia práctica y les dota de una red para especializada.
En el caso de los empresarios que acogen a estos erasmus, les permite refrescar su actitud emprendedora, les pone a su alcance el conocimiento de otros mercados y culturas, les da acceso a oportunidades de cooperación internacional y les proporciona nuevas ideas y perspectivas actualizadas.
El programa está destinado a jóvenes empresarios, así como empresarios ya experimentados que dirigen una pequeña y mediana empresa en los 37 países europeo. Se trata de una colaboración por un periodo que va entre uno y seis meses con el objetivo de dirigir con éxito una pyme.
CEA-PME estima que Europa debe diseñar un programa permanente de erasmus para pymes y sus empleados. La asociación considera que debería ser un programa flexible de una duración entre algunas semanas y varios meses. “Cada intercambio debe estructurarse en torno a un programa de aprendizaje diseñado por las dos compañías, con el objetivo de proporcionar capacitación al personal visitante o al de acogida”. También debe contar con el apoyo de una red europea de asociaciones locales con fuertes contactos con las pyme en los territorios locales de cada estado miembro.
